Tarjeta Roja para RCN-Winsports

2016-10-04 Leer en voz alta

DMCA
Por Carolina Botero y Laura Mora

Su abuso del derecho de autor para bloquear la libre expresión de Yeimis Echeverry en una acción que llevó a Twitter incluso a cancelar su cuenta en la red social, los hace merecedores de la roja.

Ya en marzo y abril del 2016 una parte de la fanaticada que difunde contenidos del fútbol colombiano recibió notificaciones en las que les alertaban sobre cómo contenidos: penalties, jugadas cortas, goles, incluso fotos y pequeños videos tomados desde las graderías de los estadios o de las pantallas de su televisor para compartirlas, estaban siendo dados de baja de Twitter, Vine, Facebook o YouTube por “infringir derechos de autor”.

El turno hace unos días fue para Yeimis Echeverry. Un hincha del América que publicó en su cuenta de Twitter cinco videos cortos de jugadas de la liga de fútbol colombiano. De repente el 15 de septiembre recibió, uno detrás de otro, 5 mensajes en inglés donde le informan que le retiran cada uno de los videos e inmediatamente después su cuenta fue cancelada. RCN, una de las empresas socias mayoritarias de WinSports, presentó una queja a Twitter por considerar que la publicación de Yeimis de esos contenidos son violaciones al derecho exclusivo que tienen de retransmitir los partidos de la liga. En desarrollo de esta queja, Twitter aplicó el mecanismo de “notificación y retiro” de la ley DMCA (como se conoce a la ley de derecho de autor) de EE.UU. mediante la cual los intermediarios (como Twitter), cumplidos unos requisitos y a petición de los titulares de derechos de autor, retiran los contenidos denunciados e incluso cancelan cuentas de los presuntos infractores.

El caso de Yeimis comenzó a moverse en redes sociales cuando publicó un video en el que le pedía a WinSports que le devolviera su cuenta, pues como él mismo expresó, – desde una cuenta alternativa que abrió temporalmente solo para recuperar la original -, “no sabía que en Twitter no se podía MOSTRAR UN GOL, mostrar la alegría que siente uno como hincha del fútbol”.

Yeimis sigue su pasión por las redes, al igual que otras  personas a las que les pasó algo similar en marzo y en mayo, pero además es una persona con discapacidad y usa Twitter para apoyar sus necesidades y acciones en materia de salud y para seguir un reclamo que tiene con el sistema de seguridad social de la policía. A esto sumemos que Yeimis accede a Internet con un plan limitado para celulares que se ofrecen en Colombia de “zero raiting”. Dadas sus dificultades económicas son las plataformas de Whatsapp y Twitter las herramientas centrales de su comunicación y que le sirven para reclamar sus derechos. Acceder al correo o navegar libremente por Internet es algo más complejo para él pues requiere de un dinero extra y de una visita a un café Internet.

Esta realidad supone un obstáculo para que proteste el reclamo de RCN y defienda su libertad de expresión. Resulta que para que Yeimis pueda defender como “uso honrado” lo que hizo con las jugadas de los partidos de fútbol, tiene que hacer una contranotificación en los términos de la DMCA y, en la forma como Twitter lo ha establecido; para esto, entre otras cosas, Yeimis debe enviar correos electrónicos, es decir, contar con dinero y tiempo extra, su solución no está a un solo clic de distancia.

Desde Fundación Karisma acompañamos a Yeimis en el proceso. Nos enteramos de que dado que los correos llegaron en inglés Yeimis no podía entender lo que sucedía. Se informó por las respuestas que recibió a su video por Twitter y porque unas horas después de la llegada de los primeros correos recibió nuevamente las notificaciones, esta vez en español. Pensó que bastaba con responder alguno de esos correos pidiendo que le restituyeran la cuenta. Fue en este momento que empezamos a ayudarle y le explicamos que, debido al trabajo de seguimiento que hemos estado haciendo de estos procesos, sabemos que es necesario responder cada una de las notificaciones y que hay que hacerlo con unas declaraciones concretas (que incluye: jurar que de buena fe considera que hace un uso honrado de los contenidos y que acepta la jurisdicción de una corte en EE.UU), y además le indicamos que en lo posible debe hacerlo en inglés (por los datos que hemos recogido sabemos que el idioma es un elemento clave para la efectividad de las contranotificaciones).

Tan solo hacer esto para Yeimis no fue sencillo y nos tomó varios días. Asumir que todas las personas usuarias tienen acceso a Internet y pueden realizar la defensa de sus derechos en inglés no es una conjetura válida en Colombia. Sin embargo, lo logramos y Yeimis envió las contranotificaciones. Pocas horas después recuperó su cuenta. Pero no podemos atribuir el éxito a las contranotificaciones que ayudamos a hacer. Todo indica que la cuenta fue habilitada no porque éstas se hubieran tramitado, sino porque RCN se retractó de la reclamación. Seguramente el escándalo y el eco que el caso de Yeimis tuvo en Twitter al volver a mover etiquetas como #NoMasCensuraWinsports (con la que se denunciaron los primeros bloqueos de contenidos y cancelación de cuentas relacionadas, principalmente, a partidos de la liga Águila), fue lo que hizo el verdadero trabajo para recuperar la cuenta.

Como otros casos en donde se aplica la DMCA para bloquear contenidos e incluso cancelar cuentas por actuaciones cotidianas de quienes usan las redes sociales, este caso deja muchas inquietudes. El caso de Yeimis confirma que las personas afectadas generalmente no conocen las razones de la denuncia -ni tampoco los motivos del retiro de la reclamación-; es más, como lo dice el propio Yeimis, cuando la persona se percata de que la acusan de infringir el derecho de autor, ni siquiera entienden cómo estos videos cortos o imágenes se constituyen en una violación, sobre todo si además su cuenta tiene pocos seguidores. El caso de Yeimis ratifica también que el idioma es una barrera importante y que el sistema no facilita a las personas usuarias defenderse, al punto que hace falta que las plataformas sean más activas en apoyar estos procesos. Algo falla cuando el propio usuario no puede defenderse.

De otra parte, este caso también muestra que las redes sociales se usan por las personas para hacer efectivos sus derechos. En consecuencia, bloquear contenidos pero, sobre todo, llegar al extremo de cancelar cuentas tiene efectos graves para los y las usuarias. El mecanismo de cancelar cuentas porque hay violaciones sucesivas no es claro y puede suceder que se aplica en bloque sin fórmula de juicio, sin advertencias previas como le pasó a Yeimis. Adicionalmente, tampoco es claro el efecto que tienen las advertencias después de una cancelación, ¿quedó marcada esa cuenta o se reivindicó al demostrar que el uso fue un “uso honrado”?

El propio Yeimis nos informó que después de lo sucedido le aconsejan no volver a compartir su pasión por el fútbol como lo venía haciendo. A Yeimis esto le parece “un poco injusto porque el fútbol es una pasión que siempre se debe compartir PORQUE ES ALEGRÍA Y ENTRETENIMIENTO y no algo que ya no se pueda compartir en un video, además de mi cuenta me movía y me muevo con todo lo relacionado con mi salud, lo de la Policía y este tipo de cosas que… sólo me pasan a mí.” Es importante reconocer que para Yeimis, como para cualquier persona, hoy en día los efectos de la cancelación de una cuenta equivalen al “ostracismo” o destierro en la antigua Grecia y por tanto debe ser tratado con ese nivel de complejidad.

Es importante garantizar que los intermediarios como Twitter no sean responsables de las infracciones que puedan cometer las personas que usan sus plataformas y apoyamos entonces que existan mecanismos con ese propósito. Para Fundación Karisma sin esta garantía el desarrollo de Internet estaría comprometido. SIn embargo, el mecanismo “notificación y retiro” de la DMCA de EE.UU. ha sido ampliamente criticado porque entre otras cosas “es un mecanismo desproporcionadamente desequilibrado en contra del ciudadano” que de hecho, fomenta que los intermediarios retiren cualquier contenido sin importar lo frívola de la petición, por tanto debe ser cuestionado y arreglado.

Internet es un espacio en donde nos convertimos en constructores de conocimientos colectivos, es un espacio para la exploración, la creación y la expresión, es decir, un escenario para el ejercicio de derechos, en virtud de esto, debe ser un lugar en donde las reglas sean equitativas. En el fondo el problema está en la propia DMCA y por tanto es necesario trabajar para equilibrarla. Sería bueno, por ejemplo crear mecanismos que permitan detectar abusos por parte de los titulares. Se podría, por ejemplo, establecer que el uso que empresas como RCN y su canal WinSport hacen de este mecanismo puede ser abusivo. Así la persecución que han desplegado contra sus fanáticos también debería equivaler para ellos en una “acumulación de tarjetas amarillas”, que les merece una tarjeta roja, debemos desarrollar esa idea.

Pero, como no está en nuestras manos cambiar la ley de EE.UU., en Karisma creemos que es posible pensar y plantearles a las plataformas que, como mínimo, hagan ajustes al sistema. Las redes sociales podrían apostar por mejores prácticas para el respeto a los derechos de las personas que las usan, no sólo para los titulares de derechos de autor. Creemos que pueden hacer ajustes que faciliten a las personas usar el mecanismo de contranotificación, en general proteger mejor sus derechos con acciones. Por ejemplo, derivado del caso de Yeimis podríamos pedirle a Twitter que dado su éxito en los planes de “zero raiting” acaso ¿no debería tener mecanismos de contranotificación dentro de su propia plataforma? Esto permitiría a usuarios como Yeimis hacer la contranotificación sin necesidad de acceder a Internet.

Si este tema le interesa, espere el informe de investigación que Fundación Karisma prepara sobre este y otros casos que estamos estudiando y que revelará nuestro análisis general y las recomendaciones que haremos a las plataformas.

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